jueves, 27 de mayo de 2021

El Lago de John Cranko en el Liceu por el Ballet Nacional Checo

Lago de los Cisnes del Ballet de Praga
Foto: Sergej Gherciu


El Ballet Nacional Checo llega al Gran Teatre del Liceu con El Lago de los Cisnes. Por primera vez en España, se estrena la coreografía de John Cranko, basada en la obra original de Marius Petipa y Lev Ivanov, y con dirección de escena de Birgit Deharde, Andria Hall y Filip Barankiewicz. En palabras de Cranko, la propuesta 'se basa en el estilo classicoromàntico de Marius Petipa' pero con ligeras variaciones, como 'la eliminación de movimientos musicalmente repetitivos y el realce del drama, convirtiendo al príncipe en un verdadero ser, un hombre que experimenta la tragedia'. La Orquesta Sinfónica del Gran Teatre del Liceu, dirigida por Václav Zahradník, da vida a una partitura icono del ballet clásico

Carolina Masjuan

El Ballet Nacional Checo de Praga ocupa una posición sólida en el contexto centroeuropeo de danza. Su fundación en 1883 dio lugar a la continua tradición evolutiva de la danza profesional checa, siendo la compañía más grande de la República Checa con bailarines de dieciocho nacionalidades.

Marek Svobodník, Nikola Márová, Adam Zvonař
Foto: Sergej Gherciu

La producción de John Cranko se caracteriza por su lectura humana del personaje. Como en todos sus ballets, la dramaturgia tiene un peso específico lo que hace más convincente la historia que llega más al público actual. Siegfried es un ser humano real, con un rol con más peso que en el ballet original. Y como Siegfried es humano y se siente culpable por haber traicionado a Odette, no puede haber un final feliz para los dos amantes: él tiene que morir y ella debe seguir siendo un cisne. 

Más que una historia de amor, este famoso cuento de hadas es un fatídico viaje del alma.

Quizás lo más destacable sea el cuarto acto, un acto básicamente blanco, pero incluyendo un fantástico Paso a dos, marca de la casa, para los amantes y con algunas licencias frente a otras versiones más convencionales. La música del cuarto acto es del Hamlet de Tchaikovsky. Se trata de una hermosa pieza musical que encaja muy bien con el ballet. Odette está rota y casi demasiado débil para caminar, Siegfried intenta levantarla, sosteniéndola debajo de sus brazos/alas, tratando de ponerla de pie, pero ella se desliza entre sus brazos, cayendo al suelo una y otra vez. El final muestra a Siegfried ahogándose en el lago desbordado, con un efecto realmente impresionante por los metros y metros de tejido azul "fluyendo" en el escenario.

Hablamos con Roger Cuadrado bailarín solista en la compañía checa para que nos explique un poco sobre esta producción :

¿Cómo ves tú la versión de Cranko repecto a otras que hayas bailado?
- Pues la versión de John Cranko es la primera que he bailado. He tenido la oportunidad de ver como espectador otras versiones, y diría que lo que me sorprendió más al principio fue la diferencia que había con otras versiones más tradicionlas en cuanto a la música, sobre todo en las variaciones de los papeles principales en el tercer acto.

¿Qué destacarías de ella, que te gusta más y que menos?
- Destacaría la manera que tenía Cranko hacer los personajes humanos y también como era capaz de hacer entender la historia detrás de estos y transmitir sus emociones. Aunque a veces para mi gusto la pantomima del primer y tercer acto se puede hacer un poco larga y también las variaciones del pas de six o de las naciones invitadas del tercer acto. Los actos segundo y cuarto con los cisnes creo que son preciosos, sobre todo el cuarto acto en el que como he dicho antes, utilizó músicas originales de Tchaikovsky que no se utilizaron en su momento y son preciosas y constituyen una agradable sorpresa.

¿En Praga se baila mucho Cranko? ¿hay muchos ballets de su repertorio?
- Pues El Lago de los Cisnes es el segundo ballet del John Cranko que hemos bailado durante estos cuatro años que he estado en Praga tras Onegin, que ya había bailado antes en Stuttgart. La próxima temporada en teoría también se hará Romeo y Julieta.

Roger C. Cuadrado
¿Cuál es el repertorio habitual de la compañía?
- Normalmente tenemos tres premiers cada temporada: un ballet clásico, un programa de creaciones con coreógrafos invitados, y un programa con repertorio contemporáneo o neo-clásico. De clásicos hemos hecho mucho repertorio que también se hace en Stuttgart ya que nuestro director fue primer bailarín e hizo toda su carrera en Stuttgart, por ejemplo: La fille Mal Gardée de Ashton, Onegin y el Lago de los Cisnes de Cranko, la Bella Durmiente de Marcia Haydée. También otros clásicos que estaban ya como repertorio antes como el Cascanueces de Yuri Vamos, Snow Queen de Michael Corder o la Bayadère de Javier Torres.

De contemporáneo o neo-clásico he tenido la oportunidad de tener repertorio más variado o nuevo para mí como Bella Figura, Petit Mort y Gods and Dogs del maestro Jirí Kylián con quien hemos tenido el honor de trabajar personalmente. Cacti de Alexander Ekman, Minus 16 de Ohad Naharin, Kafka de Mauro Bigonzetti, y creaciones con coreógrafos invitados.

De hecho tú en Stuttgart ya debías haber bailado mucho de él, ¿es difícil hacerse con su estilo?
- Es difícil si no hay alguien que te explique cómo enfocar cada personaje, ya que como he dicho antes para Cranko incluso el cuerpo de baile tenía vida y personalidad. En Stuttgart tuve la suerte de trabajar con la coreóloga y asistente de Cranko, Georgette Tsinguirides, quien tenía todo el conocimiento y experiencia de cuando se crearon estos ballets y es quien transmite principalmente este espíritu.

¿Hacéis muchas giras? ¿Es esta la primera después del confinamiento?
- Normalmente hacemos una o dos giras al año. En estos cuatro años hemos estado en Sevilla, Finlandia, China, Corea del Sur y ahora Barcelona. Sí, teníamos una gira en enero en Tel Aviv pero no pudimos ir. Por suerte la situación ha mejorado y podemos venir al Liceo donde no he bailado.

¿Hace mucho que habéis vuelto a retomar la actividad? ¿Estáis bailando ya normalmente en vuestro teatro?
- Pues justo abrirán los teatros con un 50 por ciento de capacidad cuando volvemos de la gira de Barcelona, ​​pero hasta ahora han estado cerrados desde Octubre. Hemos seguido trabajando y ensayando como hemos podido, grabando online alguna programación nueva, pero sin público.

Roger dejará la compañía al acabar esta temporada dando un cambio radical a una buena carrera como bailarín clásico. Le deseamos toda la suerte del mundo en esta nueva etapa. Si quieren saber más acerca de él, enlazamos una reciente entrevista con David Rodriguez, que pueden escuchar aquí

Adam Zvonař, Nikola Márová y el cuerpo de baile
Foto Sergej Gherciu

Una vez acabadas las funciones del Liceu la compañía retoma las funciones en su sede con El Lago, como pueden comprobar en este enlace

Se agradece que por fin se vea un Cranko en Barcelona, esperamos que sea sólo el comienzo y que pronto podamos disfrutar de sus obras maestras, como Onegin, Romeo y Julieta, La Fierecilla Domada, así como las de otros grandes creadores como Mc Millan o John Neumeier, tan raros de ver por España.


No hay comentarios:

Publicar un comentario